lunes, 3 de septiembre de 2012

Marta Lynch 301-600

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Su nombre no significa nada para quien tenga menos de 40 años y no se interese en la historia de la literatura argentina.  Pero entre medio de las décadas del 60 y 70 ella aparecía, ubicua,  hablando en televisión o comentando en Radiolandia. Uno de sus textos,  incluso, fue novelado para la hora del te: la Sra. Ordoñez, y la protagonista era una Luisina Brando maquillada y con sombrero.

Nadie la recuerda, salvo sus contemporáneos y quizá en ese olvido hay  justicia, porque no era una gran escritora, yo creo que no, pero no lo puedo verificar repasando sus paginas, me pasa con los libros de Marta Linch que los he perdido en el camino y no los volveria a comprar. Eran best seller, y debía leerla si aspiraba a subirme, parada y al fondo, en el bondi de la cultura, lo que yo, entonces,  pensaba que era la cultura. Digo, no era una gran escritora: no recuerdo ni una linea de sus textos.

Se pegó un cuetazo por mano propia, simplemente porque no toleraba envejecer. Nunca fue linda- miro en sus fotos, su cara de caballo- pero además no tiene una mirada linda. Es que Marta Lynch amaba el poder y el ejercicio del poder, y eso afea a cualquiera, aunque te vistas de seda. Estuvo al lado de Frondizi, fue a Cuba como emisaria de vaya a saber que y supo escribir sobre Tania y el Che, volvió en el avion que trajo al Pocho, se revolcó en la oficina de Massera con la bombacha baja (y dicen que le escribia al Almirante, que vampirizaba todo lo que dios no le había dado y el diablo le mezquinaba y el ni siquiera leìa las cartas) y terminó al lado del Alfonso, haciendose cruces por la tortura y los desaparecidos.

Lacan afirma que la estética es el último velo frente a la castración, o a lo Real (al cadáver inimaginable que hay abajo del maquillaje) A Marta Linch la mató que el velo no velara. Envejecer con gracia no es para cualquiera. La Marta Lynch, señora de clase alta, con todos sus emblemas y blazones, siempre había mezquinado su fecha de nacimiento. Imaginense uds. a una mina que a los 30 no quiere decir su fecha de nacimiento: nada bueno podrá advenir. En los cuarenta años que pasaron entre el cenit de su belleza y su caída final  se dio el gusto de pavonearse desde el escaloncito de su clase social entre el pueblo, con voz engolada y modales a imitar por las parvenú. Igual no le sirvió de nada. No toleró la vida que se había inventado.

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La crítica  podían decir desde “una de las grandes escritoras del siglo 20″ a “escribe mal”. Uno de los pocos que la querían era Jorge Asis, que sacó la cara por ella y paradojicamente, también por Haroldo Conti y ayer lo vi en la tele, y  andaba haciendole cabriolas a la derecha en vivo . Si bien era famosa, y hoy en Puan alguien puede escribir alabanzas -los olvidados garpan- en el 78, en una reunión de escritoras latinoamericanas en Canadá, hizo elogios del proceso y muchas no la perdonaron: fue abucheada.

No la mató la guerrilla, ni la triple A, ni la juzgó la democracia, ni su marido la dejó sin herencia por haberlo cagado duro y parejo. No llegó a experimentar el olvido social, ni la miseria.  La mató la banalidad de creer que el ser que uno es se agota en la imagen que devuelve el espejo y el desinterés de los varones.

No es la amante del poder, ni la escritora, ni la mina de clase alta la que me hace pregunta. Me pregunto mas bien que veía en el espejo la Marta Lynch, a los sesenta, o tal vez desde muchísimo antes.

Dorian Grey, tal vez.


Bizarra y pestilente tarea de destapador de pozos ciegos del peronismo

Y como continuación del post que Louis tuvo la amabilidad de destacar, tenemos otra respuesta no hallada en Internet a los dichos de J. L. Borges en una nota publicada en varios diarios argentinos en abril de 1971 (imperdible):

…esta vez por parte de la escritora MARTA LYNCH, acompañante de Perón en el vuelo que lo trajo de regreso, amante de Massera. Lancémosla al cyberespacio…

...

“Entre las muchas desoladoras vergüenzas que plagan a la Argentina está sin duda la de tener a JLB como máximo escritor. En la carta se observan, con dolor, la adjetivación impecable, la deslumbrante redacción, junto a una estulticia tal que clama al cielo.”

“Durante una mesa redonda en la Hebraica fui rechazada por Borges violentamente, a causa de que un personaje de mi novela “La señora Ordóñez” –un personaje, no yo- hacía la defensa de su posición en el peronismo. La arrogancia, la brutalidad que utilizó me demostraron su trasfondo, la supuesta modestia del escritor que ha despreciado a las masas desposeídas de Latinoamérica.”

“No lo siento por él, que es caso perdido, sino por nosotros, por lo que pudo ser como artista. De todos modos, lo que dice no es memorable ni literaria ni políticamente. Y si analizamos su obra se advierte que nadie fue a buscar grandezas en el Aleph, sino tan sólo un juego de ajedrez. Lo serio lo buscamos en Cortázar o en Vargas Llosa.”

“Lástima que Borges carezca del atractivo infinito de su madre, de la que es una miniatura. Sin duda ella sería capaz de batallar mejor; al menos no reduciría el más importante movimiento de la historia argentina a un nivel de almaceneros y aguinaldos.”

MARTA LYNCH, escritora.

...

Es como muy fuerte ¿no? Da tanta vergüenza ajena que a uno le empieza a dar, no sé… como una rara mezcla de náusea y de casi ternura… hizo bien en suicidarse en 1985, cuando JLB era ya una gloria indiscutida de las letras universales. Una gloria indiscutida salvo en Peronia, claro.

Otro que se sumó en aquella ocasión al corifeo de bárbaros para responder la nota de Borges fue el ahora viejo escriba peronista y puteador profesional DALMIRO SÁENZ, quien consultado al respecto contestó con este pensamiento de profundidad memorable: “Leí la carta de Borges. Decididamente, entre Jorge Luis y Graciela, prefiero a Graciela.”

Uno quisiera no tener que vérselas revolviendo estas pequeñas miasmas episódicas de la historia argentina, pero como seguimos gobernados por la misma mafia de aquel entonces, empeñada ahora en reivindicarse a sí misma distorsionando los hechos históricos, se hace necesario recuperar estas anécdotas, ausentes en la web, para que de aquí en más, y gracias a EOC, cuando alguien ‘googlée’ “MARTA LYNCH” o “DALMIRO SÁENZ” o “SINDICATO DE LUZ Y FUERZA” encuentre por lo menos algunos fragmentos de una verdad ocultada. Se hace necesario, repito, aunque esto no tenga más fuerza que la de un escupitajo a la aplanadora antes de que nos pase por encima.



P.D.: Si van a http://mapa.buenosaires.gob.ar/ y ponen LYNCH MARTA, verán que hay 3 cuadras en Puerto Madero con su nombre a 1 cuadra del Puente de la Mujer.  ¿ Es bueno ? ... ¿ Es malo ? ... Que se yó.  Es.  Tengo 38 años para 39, soy un pibe.

ENLACES/FUENTES:
http://elnosoyloquedeberia.wordpress.com/2012/03/19/las-que-mueren-en-la-vispera-hoy-marta-lynch/
http://articulos-interesantes.blogspot.com.ar/2012/08/continuando-con-mi-bizarra-y-pestilente.html
http://santamilonguita.blogspot.com.ar/2011/02/dialogo-de-dos-culturas.html
http://www.articulos-interesantes.blogspot.com.ar/2012/08/barbarie.html
http://www.genteloca.com/biblioteca/16247/nota-de-jorge-l-borges-a-concentracion-civica