lunes, 30 de abril de 2012

El helecho dorado aka Zlaté kapradí (1963) - Director: Jirí Weiss

Basada en un cuento de hadas del escritor Checo Jan Drda


 Jura es un pastor que durante la noche de San Juan encuentra un helecho dorado y lo lleva a su cabaña. Esa misma noche llegará una misteriosa mujer, Lesanka, a pedir que devuelva el helecho. Ambos se enamorarán, pero su felicidad acabará cuando Jura sea reclutado para la guerra. Lesanka le dará una camisa que lo protejerá de todo, él no deberá quitársela nunca...



This black and white film, with superb photography, is most engaging and of a unique lyricism and nearly invisible seams running across the plot The woodcutter and Sylvana dance a fast folk dance full of life at the village fair at the beginning of the film in a contest of endurance. Before the woodcutters hapless sortie to get the viziers nightingale, he finds himself in the company of officers and their women dancing an elegant and very slow minuet, all wearing identical golden masks. It is the same tune only this time it as much a herald of doom as the folk dance was the expression of love and life.
The "Saragossa Manuscript" by Wojciech Has, whose plot is at about the same time, has some undertones of the "Golden Fern" but does not even begin to match either the latter's lyricism, story line or its more visual aspects such as a superb, bold and expressive photography. The expressiveness of some of the characters, such as that of a fortune teller who warns our hero against the "iron rock" he is in love with and other characters are only comparable with some of Eisenstein's or Bergman's 'designs' though without the deliberate expressionist exaggeration of the former. In fact, the strongest point of the film is the way the plot, the acting, the photography and the music bind in tight whole.


El director, Jiri Weiss, es uno de los realizadores más interesantes de los que precedieron a la generación de realizadores de la Nueva Ola Checa. Comienza su carrera como documentalista para luego dedicarse a la ficción con su primer largo, Vlcí jáma de 1957. Aunque la fama internacional llegaría con una particular visión del amor en tiempos de guerra a través de su actualización de Romeo y Julieta, llevando esta clásica historia a la Checoslovaquia de tiempos de la ocupación Nazi. El tema principal que cruza la obra de Weiss es de una u otra forma, la guerra. A su vez la característica principal de la obra es un profundo fatalismo, el cual podríamos concebir como una forma de aproximarse al tema de la guerra, pero también como una visión heredada de la dura vida que llevó durante la primera mitad del siglo XX, y por qué no, a su exilio a consecuencia de los aciagos sucesos del 68' en Checoslovaquia. La obra que presentamos, Zlate Krapadi, pertenece al grupo de películas menos conocidas de Weiss, pero no por ello de menor calidad. Si bien escapa al prisma de corte más realista, por tratarse de un cuento maravilloso o cuento de Hadas, no escapa al tema de la guerra, pues aquí, como en varias de sus obras, la guerra será esa tiniebla que se cierne sobre los hombres, y que poco a poco los va despojando de cuanta felicidad y sentimientos puros puedan llegar a albergar.

Zlate Krapadi está basada en un cuento de Hadas del escritor Checo Jan Drda, escritor cuyas obras también han sido filmadas por otros autores de la talla de Frantisek Cap, Otakar Vavra o Martin Fric. La visión de Drda es también en cierto sentido fatalista, y este también sufrió a causa de los sucesos del 68 al ser expulsado del Partido Comunista y pasar a la lista negra de autores.

La película en cuestión cuenta la historia de un Pastor de características Donjuanescas, que una noche encuentra un Helecho dorado que en definitiva lo llevará a conocer el amor. Y es que todo cuento de Hadas, tras su aparente simpleza, lleva un entramado de temas fundamentales que subyacen dando fuerza al relato y son simbolizados a través de su desarrollo, mediante reglas, acciones u objetos. El tema fundamental en este caso es el amor, y no cualquier amor, el amor verdadero, el amor incondicional y el cómo este se enfrenta a un mundo que impone trabas y obstáculos al mismo. De esta forma entendemos el principal símbolo de la película y que le da el título a la misma, el helecho dorado que encuentra Jura es un objeto que representa el amor, la semilla que nace de el cuando está en la cabaña con Lesanka representa la unión entre ambos, y esa garra que inmediatamente trata de arrebatarla es el mundo que enseguida trata de destruir el amor que nace, semilla que será protegida por Lesanka arriesgando hasta su vida y que luego protegerá a Jura cuando esta la cose en la camisa que le da para que esté a salvo en la guerra. El helecho dorado que encontró Jura en el bosque esperará en su cabaña, de él dependerá que resplandezca con la brillantez del oro, o que se pulverice al intentar asirlo.

La película está dividida en dos grandes escenarios, la paz y la guerra. En el tiempo de Paz es cuando el amor nace, da sus frutos, resiste sin problemas al mundo que lo rodea, y transcurre en el campo, lugar que de siempre ha representado la pureza de sentimientos el buen vivir, la felicidad, en una construcción que se ha desarrollado en oposición a la ciudad. En el tiempo de guerra, Jura se verá enfrentado al mundo, defendiendo su amor a toda costa, incluso realizando pruebas arriesgadas para lograr volver a casa, pues se sabe protegido y amado por Lesanka. En ese devenir aparecerá una oscura mujer, hija de un alto mando del ejército, de naturaleza caprichosa, la cual hará todo por lograr que Jura se interese en ella y olvidé a Lesanka, de esta forma lo someterá a pruebas, que en apariencia están destinadas a recomendarlo para ser enviado a casa, pero en realidad constituyen pruebas arriesgadas en las que a ella no le importa en lo más mínimo la seguridad de Jura, y que están destinadas a que se le traigan diferentes regalos, un caballo, un collar, un canario que desde un punto de vista formal perfectamente podrían ser los que un enamorado lleva a su amada, plasmando de esta forma la artificialidad y falsedad del deseo de esta mujer por Jura. Fantástica es la escena en que ella se pincha un dedo y con la sangre que brota unta los labios y encías de Jura,  luego lo besa, pero ni aun de esa forma logra sentirse en los labios de este, pues Jura aun ama a Lesanka, y el director nos dice con esto que el amor tiene más de espíritu que de carne.

Otro punto a destacar es la realización de tres bailes durante la película que son claves en su comprensión. Antes que todo hay que recordar que el baile o la danza es una representación del amor, de la seducción, de lo erótico, lo comunicativo y bajo este prisma es que se deben entender los que aparecen en el filme. En el primero, Lesanka y Jura giran desenfrenadamente en pleno éxtasis del amor. Jura cae al suelo, Lesanka queda en pie, lo que significa que ella es quien ama más y él quien debe aprender a amar. En la segunda escena de danza, Jura baila con la hija del general, pero ninguno cae al suelo o logra cansar al otro, esto se explica porque no hay pasión ni amor entre ellos, la única capaz de agotarme es Lesanka, le dirá Jura. En el tercer baile, hacia el final de la película, Jura asiste vestido de Capitán a un baile donde todos los asistentes (Los militares y la hija del general) están disfrazados de campesinos, con máscaras que representan su rostro y el de Lesanka, y realizan un baile falso, esquemático, cuasi mortuorio que representa la posible muerte del amor de Jura, quien por su parte observa "disfrazado" de Capitán.


El final, que ya descubrirán por ustedes mismos, es una genialidad que cierra una historia redonda, de esos finales que no se olvidan.

Espero disfruten con esta peli, filmada en un maravilloso blanco y negro, en un scope portador de tomas impresionantes, con un extraño lirismo y simbolismo que me han parecido dignos de destacar. Hago públicos mis agradecimientos a la buena de Eurídice por otra de sus muchas traducciones, los dejo en compañía de Jura, Lesanka, Weiss, Drda y que empiece otra función.

ENLACES/FUENTES: