http://www.todaslascriticas.com.ar/pelicula/batman-el-caballero-de-la-noche-asciende
THE STUPIDITY RISES
Para entender qué pasó acá debe olvidarse que una gran película es una película efectiva. Desestimar el calvario gimnástico de Bale o el trastorno obsesivo del editor no ayuda. En una inversión mainstream se le garantiza al fanático su erección.
Así como quedaron bonitos esos copos de nieve entre tantas explosiones, también hay que reconocer que The Dark Knight Rises es la mayor estafa fílmica de la década.
De puro azar, se filtró una realidad paralela que hizo a The Dark Knight un fenómeno histórico. Ironía fatal, porque toda la filmografía de Nolan, es decir, TODA, es un pochoclo húmedo sobredimensionado como cerebro audaz.
Nolan no es inteligente. Nolan colecciona libros para principiantes. Nolan arranca con una pinza conceptos de teorías que no entiende y los exhibe en armatostes populares, ocultando su debilidad artística y mental.
Muchas veces supuse, y ahora más que nunca, que los diálogos de Heath Ledger los escribió algún catedrático desocupado especializado en nihilismo. El despliegue dialéctico entre anarquía y fascismo poseía una lucidez espeluznante. Heath Ledger se convertía en un caso extraordinario de filosofía en el cine.
No hablo de Heath Ledger por nostalgia, sino porque él es la verdadera causa de que Nolan regrese a su imbecilidad de origen. Heath Ledger fue un paréntesis en su cine, un relámpago que reveló verdades incómodas, hizo gigante una película que no merecía serlo y ya no podemos ser espectadores inocentes.
The Dark Knight Rises posee una estructura idéntica a The Dark Knight, con el detalle de que la estructura de The Dark Knight era simbiótica a Heath Ledger; la película se convertía en una fiesta rizomática sin descuidar su planteo existencial y político. Cada acto de Heath Ledger definía por oposición a Batman y reacomodaba al resto de los personajes. Siendo su némesis, el mito encontraba la apoteosis. La condena social que se autoimponía Batman era un reconocimiento respetuoso al pensamiento que exponía Heath Ledger en la sala de interrogatorio: dos freaks con un final pesimista pero mitológicamente coherente.
¿Iba a funcionar otra película sin ese estímulo intelectual? Heath
Ledger dejó un antecedente insuperable y el catedrático desocupado no
quiso saber nada o se suicidó para dar un buen ejemplo. Nolan y su
hermano entraron en pánico ante un guión en estado de sitio. ¿Qué hacer,
entonces? Repetir.
Ejemplos tenemos desde la primera escena. En The Dark Knight, en el
contexto del robo a un banco, se presenta a Heath Ledger del siguiente
modo: detrás de una máscara de látex de payaso, hay una máscara pintada
de payaso. En The Dark Knight Rises, en el contexto del robo a un avión,
se presenta a Bane como un enmascarado debajo de una capucha. Si en la
primera el juego de las máscaras era una introducción al andamiaje
filosófico, en la segunda es una vueltita innecesaria de tuerca, una
gracia menor.
Se reitera la anarquía en Ciudad Gótica, hay un sub-villano ambiguo,
una mirada sobre el terrorismo y la policía entra en jaque moral. Hasta
la explosión virtuosa del estadio de fútbol parece una sombra tímida de
la explosión del hospital en The Dark Knight. Pero allí donde había
sentido y drama del fuego, acá hay una parafernalia digital triste y
vacía.
Las trampas del guión, absurdas y rebuscadas, confirman lo desesperado que está Nolan por abrirle la boca al espectador. ¿Había necesidad de inventar un personaje inverosímil como el de Cotillard para conectar con Batman Begins o reservar el nombre de Robin para el último minuto? Ojalá fuera esto lo peor.
Como The Dark Knight tenía al catedrático nihilista creando situaciones de lectura múltiple, Nolan y su hermano rellenaron The Dark Knight Rises con pedorradas filosóficas disfuncionales. Resulta que hay un cuestionamiento al capitalismo, a la bolsa (¿?), al sistema jurídico y a la reincidencia criminológica. Tópicos tácitos en The Dark Knight, pero acá expuestos como un buñuelito recalentado en microondas. Inteligencia gomosa, superposiciones narrativas que se valen de lo barroco como coartada para esta violación a la originalidad.
Y para rematar, a Batman le esculpen una estatua y lo veneran,
asesinando la magia del personaje. Afortunadamente, los espectadores
harían lo mismo con Christopher Nolan.
Dejo algunas fotos y datos de los 70 y pico de años de Batman, para recordar lo bueno y lo malo...
ESTE ES UN MISCELANEO SOBRE EL HOMBRE MURCIÉLAGO, A QUE NO SABIAN ALGUNAS.
- EN SU CONCEPCION ORIGINAL BATMAN NO TENIA PROBLEMA EN DEJAR MORIR A SUS CONTRINCATES NI EN USAR ARMAS DE FUEGO, DE HECHO EN LOS PRIMEROS NUMEROS SE PRESENTA ASÍ. ERA LA CONCEPCIÓN DE LOS PALADINES DEL CRIMEN DE LOS AÑOS 30.
- INICIALMENTE LAS AVENTURAS DE BATMAN SE DESARROLLABAN EN NEW YORK, DESPUÉS APARECERÁ GOTHAM.
- EL DOBLAJE EN ESPAÑOL DE BARBARA GORDON-BATGIRL EN LA VERSION PARA TELEVISIÓN DE LOS AÑOS 60, LO HACÍA NADA MENOS QUE MARÍA ANTONIETA DE LAS NIEVES, LA CHILINDRINA.
- LA SERIE DE SMALVILLE SE DESARROLLÓ A PARTIR DE UNA IDEA ORGINAL QUE PRETENDÍA MOSTRAR COMO FUE LA ADOLESCENCIA DE BRUCE WAYNE Y NO DE CLARK KENT.
- EN LOS SERIALES DE LOS AÑOS 40 DE BATMAN YA SE PRESENTABAN LAS ONOMATOPEYAS VISUALES QUE SE HICIERON FAMOSAS EN LAS SERIE DE TV DE LOS AÑOS 60.
- EL DISEÑADOR DE GOTHAM DE LA PELÍCULA BATMAN DE 1989, DIRIGIDA POR TIM BURTON, EL ARQUITECTO ANTON FURST SE SUICIDÓ TIEMPO DESPUES DEL ESTRENO DE LA PELÍCULA.
Batman con Robin (1943)
Durante
la década del 40, los estudios cinematográficos Columbia Pictures pusieron sus
codiciosas zarpas sobre el héroe de Ciudad Gótica, sacando al ruedo dos seriales.
Batman (1966)
En Enero de 1966 la cadena televisiva ABC puso en la pantalla chica, con el pegadizo y machacante tema musical de Neal Hefti, la serie llamada Batman. La misma estaba compuesta de dos emisiones semanales de media hora de duración que conformaban un único episodio dividido en dos capítulos. En el final del primero, nuestros héroes caían invariablemente en una trampa tan ridícula como mortal (“¡No se pierdan el próximo capítulo a la misma batihora por el mismo baticanal!”), para luego terminar escapando en una forma igual de ridícula en el capítulo siguiente
Batman (1989-1992)
Batman Forever con Robin (1995)
Batichica, Batman y Robin (1997)
Batman Begins (2005)
Batgirl (Fanática)
ACERCA DEL BATMAN DE CHRISTOPHER NOLAN
Un verdadero caballero… “antiterrorista”
Fecha: Jueves 9 de agosto de 2012Por: Demian Paredes
Batman, el caballero de la noche asciende, última entrega de la trilogía de Christopher Nolan, se transformó en un fenómeno más allá del éxito de público: además de ser un “peso pesado” hollywoodense, el día de su estreno, en un cine de Colorado, un joven de 24 años entró disfrazado de villano, con un rifle, y terminó disparando al público, matando a 12 personas y dejando a decenas heridas. Y además, la película dio lugar a una serie de interpretaciones políticas y discusiones: se la llamó “película neocon” (neoconservadora), reaccionaria, antirrevolucionaria.
La película, “una de acción y superhéroes”, cumple su cometido: imágenes impactantes, mucha acción –como la de los dos aviones del inicio–, (poca) tecnología y algunas escenas “sentimentales” hacen que, más allá de algunos baches en el guión, cualquier espectador se quede “pegado” al asiento las casi 3 horas. Siguiendo con las dos anteriores entregas, Nolan nos presenta un Batman aggionardo, “oscuro” (como la misma “ciudad Gótica”), con tribulaciones personales y “profesionales”, en una época donde ya no están claras las fronteras “entre el bien y el mal”, donde los ciudadanos son pobres gentes amenazadas –tema “clásico” de la industria cultural norteamericana, recrudecido tras el 11-S–, ante la decadencia y crisis del Estado, por fuerzas “hostiles”, “extrañas”, terroristas de todo pelaje, etcétera.
La historia retoma el fin de la anterior: Bruce Wayne se refugia en su mansión, y pasa 8 años encerrado, aislado del mundo. Un robo por parte de Gatúbela lo hará salir nuevamente a la acción, en momentos donde Bane, un delincuente que está organizando un ataque terrorista desde las alcantarillas, comienza una serie de robos, con un ataque a la bolsa de comercio… y llama a la insurrección de los pobres contra los ricos. Batman los combatirá.
Desde el punto de vista ideológico, la película fue criticada por la izquierda y el movimiento Occupy Wall Street, que dijo que tenemos aquí a un “Batman neocon”. Se generalizó el análisis de que es una película reaccionaria porque confunde (mezcla, amalgama) revuelta popular, lucha de los pobres, con el caos y el descontrol. Los activistas de OWS la señalaron como una película “antipopulista”, donde la pobreza y la lucha “del 99%” termina capitalizada por un “villano” terrorista –quien a la vez es manipulado–.
Otra lectura posible es que es “obamista”: una alerta de peligro para los ricos: la rebelión de los pobres si no están dispuestos a “repartir” algo de sus riquezas.
En el mismo sentido, la crítica argentina señaló: “Bane viene del desierto, donde estuvo encarcelado; es el feliz poseedor de una bomba nuclear (como ciertos integrantes del Eje del Mal), crea unas milicias populares integradas por presos comunes y celebra farsas de juicios sumarios contra representantes del poder, como un nuevo Robespierre, un Lenin de Ciudad Gótica”. Y otra: Bane “es una suerte de profeta del apocalipsis, un hombre antisistema con algo de anarquista, capaz de castigar la especulación y la codicia de los agentes bursátiles de Wall Street, pero también de generar el caos entre los inocentes cual asesino serial”.
En medio de tanta acción y lucha, el mensaje político e ideológico es claro: mejor no rebelarse, no luchar, ya que todo se descontrola y termina mal; y por ello es preferible la estabilidad de las instituciones, que haya policías que hagan (bien) su trabajo, con funcionarios honestos, etcétera. La otra idea que hay es que los ricos “deben existir” y “son necesarios”: así la riqueza que ellos tienen no sólo puede financiar aparatos espectaculares (vehículos y armas) para combatir a “los malos”, sino también para desarrollar proyectos científico-ecológicos y para hacer filantropía: en este caso, financiando un hogar de niños sin familia. Para finalizar. Está el caso de James Holmes, el joven de 24 años que disparó.
Diversos análisis señalaron varias causas para explicar cómo actuó: es un universitario con excelentes calificaciones en neurociencia… que terminó trabajando en McDonald’s (la desocupación en EE.UU. para la juventud duplica la media nacional: está en el 19%), lo que provoca frustración, y el fácil acceso a las armas y municiones.
Efectivamente, se puede decir que confluyen tres elementos: la crisis social, producto de la crisis económica que lleva, a quienes no luchan colectivamente, a expresar su odio y su impotencia de manera individual; el otro elemento es la “cultura de la violencia” norteamericana, donde, sea con “superhéroes”, policías o militares, siempre EE.UU. es un “país amenazado”, sea por el terrorismo o extraterrestres, y debe defenderse (ofensivamente). Por último, este aspecto cultural-ideológico acompaña –sea con Bush o con Obama– la política real y efectiva del imperialismo yanqui.
Todo confluyó para que este joven “mezclara” realidad y ficción, y actuara como lo hizo.
Cultura
ENLACES/FUENTES:
http://batiblogdetito.blogspot.com.ar/2008/02/algunas-curiosidades-sobre-batman.html
http://batiblogdetito.blogspot.com.ar/
http://cuentotales.blogspot.com.ar/search/label/BATMAN
http://entodoelcolodrillo.blogspot.com.ar/2011/10/batman-la-serie-de-tv-de-1966-making.html
http://entodoelcolodrillo.blogspot.com.ar/search/label/Batman%201966
http://templo-kaori.blogspot.com.ar/2012/02/especial-del-mes-de-batman-resena-de.html
http://www.taringa.net/comunidades/batmanfc/5848300/Chicas-de-Batman-cinematografico.html
http://igualafreak.blogspot.com.ar/2010/06/batman-foreverpor-siempre-o-el.html
http://www.filterfoundry.com/blog/2012/07/18/evolution-batman/
http://www.taringa.net/posts/imagenes/15052811/Fanaticos-de-Batman_-Pasen-por-favor_____.html
http://www.bitacoradevuelo.com.ar/?p=15706
http://www.pts.org.ar/spip.php?article21042